En estos días que llega más luz, más sol, unos días de descanso en el trabajo (para algun@s) por delante, podemos dedicarnos un rato a nosotras mismas para que la primavera no nos pille desprevenidas, y es que llega el momento de una manicura, una pedicura, acondicionar la piel para el sol... En fin: todas esas cosas que deberíamos hacer periodicamente y que a duras penas hacemos.
No os voy a explicar como acondicionar vuestra piel para el sol, porque de momento no es el cometido de este blog, sin embargo, sí os diré qué hacer con vuestras manos y pies.
La clave, como ya suponeis es: limpieza, exfoliación e hidratación.
Os recomendaría que ahora que todavía no empieza con demasiada fuerza esta época del año en la que los esmaltados semipermanentes se ponen a la orden del día ya que nuestras manos y pies se mojan más que en invierno y también se enseñan más... Os diría mi consejo
MANOS
1. Retirar el esmalte
2. Dejar las manos en remojo con algún tratamiento blanqueante y para ablandar las cutículas
3. Una exfoliación
4. Retirar las cutículas
5. Esmaltado con calcio (o aquel que necesitemos)
6. Hidratación
PIES
1. Retirar el esmalte
2. Tener los pies en remojo con algún producto calmante y descongestionante
3. Retirar las pieles muertas de la planta y el talón
4. Tratar las cutículas
5. Exfoliar hasta dejar suaves
6. Hidratar
Después de este proceso, podemos esperar unos días y realizar un esmaltado semipermanente en manos y pies. Ambos lucirán bellos, nuestro esmaltado será más duradero que si lo hacemos todo en la misma sesión, y estaremos listas para la llegada del buen tiempo.
En caso de tener algún problema de pies (tipo callosidades, etc) siempre es recomendable pasar por el podólogo antes de empezar a utilizar zapatos más abiertos.
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